Una campana del siglo XVI, en Suiza, vuelve a repicar para alertar sobre la pandemia
Renato Hausler grita la hora desde el campanario de la Catedral de Lausana, en Suiza, y justo después le sigue la centenaria campana que solo tañe cuando la habitualmente tranquila ciudad suiza de la ribera del Lago Leman está en peligro.
El campanero nocturno toca La Clemence (La Clemencia), una campana fabricada en 1518, para llamar a la solidaridad a los lausaneses y hacer frente a la pandemia del coronavirus, dice Hausler a la AFP.