Dolmen de Guadalperal en Peraleda de la Mata, España

Es una rara oportunidad poder contemplar tres capas distintas de la historia humana, que abarcan más de 7,000 años, en un solo sitio. Pero si tiene suerte y termina cerca de la ciudad española de Peraleda de la Mata durante una severa sequía, puede apreciar un impresionante lugar de enterramiento creado por humanos antiguos, las trágicas repercusiones de los proyectos de ingeniería civil de Franco y las fuerzas climáticas que son amenazando con interrumpir la vida tal como la conocemos.

Debido a una sequía histórica en el verano de 2019, el Dolmen de Guadalperal emergió por completo en la costa en retroceso del embalse de Valdecañas por primera vez en más de cinco décadas.

El monumento megalítico una vez se sentó a orillas del río Tajo. Pero en 1963, toda el área y sus gemas arqueológicas fueron inundadas por el régimen de Franco para dar paso a un embalse.

Los arqueólogos estiman que el dolmen fue creado en el quinto milenio antes de Cristo como lugar de enterramiento para los íberos neolíticos. Hay alrededor de 100 piedras en pie, algunas de las cuales tienen más de seis pies de altura y cuentan con grabados únicos.