Los orígenes de la planta de energía comienzan con un ingeniero eléctrico llamado Frantisek Křižík. El inventor iluminó el centro de la ciudad de Písek con lámparas de arco el 23 de junio de 1887, convirtiendo a Písek en el primer centro urbano de Bohemia con alumbrado público eléctrico. En 1888, después de que se hicieran modificaciones en el Molino de Podskalský para que sus rudimentarias ruedas de agua pudieran producir electricidad y la central eléctrica cobrara vida.
En 1901, la Městská Elektrárna de Písek fue equipada con turbinas Francis, que usaban palas fijas para canalizar el agua en un ángulo óptimo. Las turbinas eran tan ingeniosas que incluso hoy en día la mayoría de las centrales hidroeléctricas todavía utilizan versiones de las turbinas Francis.
Městská Elektrárna fue renovada y abierta al público como museo en 1997. Si la maquinaria no funciona, el encargado del museo puede encenderla. Aunque ahora está anticuada, sigue siendo una maravilla del ingenio mecánico. Además de los equipos mecánicos, el museo también tiene una interesante exposición de objetos como figuritas, cajas de fósforos y azulejos reunidos por un tema común: la electricidad.
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