AFP.- China inauguró su famoso Festival de Hielo y Nieve de Harbin, en el que destacan paisajes mágicos de inmensos palacios y esculturas iluminadas, los nadadores temerarios que se sumergen en aguas heladas y la celebración de bodas grupales.
Los fuegos artificiales marcaron el lanzamiento oficial del festival, que exhibe edificios y monumentos multicolores realizados a escala natural con bloques de hielo.
En los primeros días, 43 novias vestidas de encaje, abrigos y bufandas, con ramos de rosas en las manos, desfilaron con sus novios para participar en bodas grupales. Nadadores en vestido de baño desafían el frío glacial, que está a -7 ºC, en una piscina improvisada, cortada en la gruesa capa de hielo del río circundante, el Songhua.
El Festival de Hielo y Nieve de Harbin de este año recurrió a unos 170,000 metros cúbicos de hielo, que se recogieron del río Songhua.
Miles de bloques de hielo fueron cortados allí por un ejército de más de 100 obreros que trabajaron todos los días durante las semanas previas al evento. El Festival de Hielo y Nieve de Harbin, organizado en uno de los lugares más fríos de China, ya que puede tener temperaturas mínimas de -26 ºC, permite a los visitantes caminar por una verdadera ciudad de hielo, iluminada con neones.
El reconocido Festival de Hielo y Nieve de Harbin ha atraído a millones de turistas desde su lanzamiento en 1985.
La edición de este año coincide con la primera competición de esquí nórdico de la ciudad.
China está intensificando su promoción del turismo de nieve y hielo en preparación para los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán en Pekín en 2022. Se está construyendo una carretera entre la capital y Zhangjiakou, ciudad situada a unos 150 kilómetros y que acogerá los Juegos Olímpicos. Además, el 30 de diciembre de 2019 se inauguró una línea de alta velocidad que une las dos ciudades.
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