Los Benahoaritas fueron los habitantes originales de La Palma. Desafortunadamente, no sobrevivieron a la invasión castellana y se preservaron muy poco de su cultura. Este museo en Los Llanos trata de remediar esto tanto como sea posible difundiendo conocimiento sobre estas personas perdidas.
Lo que se sabe es que los Benahoaritas vivían principalmente en cuevas y a menudo fabricaban petroglifos en rocas alrededor de sus hogares y lugares de riego. Ellos pastorearon animales, hicieron alfarería y hornearon una forma temprana de pan llamada gofio . Sus muertos fueron enterrados en cuevas y no se les permitió tocar el suelo, por lo que los cuerpos fueron puestos en camas de hojas y madera.
Todas estas cosas están cubiertas en el museo, principalmente en forma de grandes carteles con información en inglés, alemán y español, pero también con muchos accesorios y ejemplos de lugares alrededor de la isla. Hay mucha cerámica, una réplica de una casa tradicional y una cueva.
La atracción estrella del museo son dos momias reales que se exhiben. Uno está en una caja de vidrio, mientras que el otro está en una cueva simulada, que muestra el estado en que se encontró. También hay un conjunto de cráneos, uno con un agujero en la cabeza que indica el uso de medicina avanzada.